30 -10-1999 ESCRIBO POR PRIMERA VEZ ....

Esa es la fecha en que empecé a darme cuenta de que te habías ido y que estaba sola, terriblemente sola. Entonces como una autómata cogí un lápiz y escribía lo siguiente: Sigo malgastando los días escribiendo... me he dado cuenta de que esta pasión es cierta aún la siento a pesar de haberla querido olvidar. Aún te siento, en la distancia, a pesar de no poder verte y espero que las circunstancias me acerquen de nuevo a ti. Hoy, me desperté pensando en tí, y quise ocultarme, enseguida,cerré los ojos y te volví a soñar, porque es otoño y la música no deja de sonar, sonrío y te necesito y lloro, hace sol y enseguida llueve, y hay una niña que mirando el día complaciente, se viste el chubasquero y sandalias y muere de ganas de jugar en la playa y una mujer que duda y desea besarme. "Sucede que me juego la muerte" (Juan Gelman)... y elijo tenerte en mis brazos. Me despierto sola en mi habitación, entristecida por tu ausencia, y con este dulce murmullo en mi cabeza. Camino sola, por la casa, descalza y apurada. ¡Cuánto necesito tus manos!, que aprieten las mías, no sentiría el suelo tan frío. Sigo soñando, cada minuto que pasa. Desnuda, húmeda y contentísima porque la vida porque la vida me regala de nuevo la ilusión, este nuevo amor no me desaparece debajo de la lluvia ni cerrando los ojos. Me gustaría poder decirte lo que me sugiere verte desnuda, en mis sueños, y lo que me consuela. Preferiría tenerte en mis brazos. Me visto deseando encontrarte en la calle: sé que es casi imposible, que será muy difícil reírnos y besarnos por el paseo o sentadas en la playa vacía, ante los ojos incrédulos, de los paseantes. No me importaría seguir arañando, con mi sangre, detrás de esos días, las paredes, presa, de esta pasión, que llenaría con muescas desesperadas. No me importaría vivir, junto al vaho de los cuerpos, escondidos, o juntando las manos divertidas debajo de los manteles, invisibles, detrás de los vidrios húmedos de las cafeterías, pienso que es casi invierno y que necesito tu calor, te necesito. Yo elijo la certeza de tenerte en mis brazos, Mujer (María).... Hoy te he sentido mejor que nunca, hoy he sentido la vida, el alma tiritando de que durase siempre y decido vivirlo despacio. Todo esto y mucho más sentía cuando en mi soledad escribía esto . Ahora creo que me es imposible escribir algo así con respecto a nosotras y eso me da pena mucha pena. ¡Joder! ¿En qué he invertido todos estos años?. De algo estoy segura de que no he vivido engañada siempre supe que el día que te fueses nunca regresarías, pero de eso a sentirte tan lejana me causa dolor y pena. Lo dejaré aquí si no me terminará dándome pena de mi misma.....